El estudio de Institución Futuro, hecho público el mismo día en que la Mesa y la Junta de Portavoces debate una solicitud de UPN de creación de una ponencia para valorar este asunto, destaca la importante producción legislativa del Parlamento de Navarra comparado con el de otras comunidades autónomas.
Sin embargo, el estudio, presentado este lunes por Javier Troyas y Belén Goñi, presidente y directora general, respectivamente, de Institución Futuro, subraya que en torno al 40% de las actuaciones del Parlamento no se corresponde con las preocupaciones de los ciudadanos expresadas en las encuestas del CIES.
Por ello, este organismo considera que el Parlamento de Navarra "debe conocer de manera sistemática qué esperan los ciudadanos de él y cuáles son sus preocupaciones, alineando buena parte de sus actuaciones con éstas".
Además, en el documento se concluye que en los últimos años se ha producido un "notable" incremento de la "esencial" función de control del Parlamento de Navarra respecto al Gobierno, aunque se indica que esta labor "se debe ejercitar en su justa medida y no como herramienta de obstaculización de la labor del Gobierno", ya que "el foco debe estar en la mejora del servicio al ciudadano".
Respecto a las cuentas del Parlamento, el informe señala que el presupuesto por habitante es el mayor de España (19.78 euros frente a la media española de 10.75 euros).
Aunque entre 2008 y 2012 este presupuesto ha ajustado sus gastos en un 8,01% (teniendo en cuenta el IPC), "hay partidas que no han contribuido a este esfuerzo y se han incrementado", como la de asignaciones a grupos parlamentarios y las retribuciones a funcionarios, afirma Institución Futuro.
Del total del presupuesto, 12.733.846 euros en 2012 (un 52%) corresponde a gastos de personal de plantilla y cargos electos, y un 22%, a la asignación a los grupos parlamentarios. Es decir, estos tres conceptos representan tres cuartas partes del total del presupuesto.
Institución Futuro asegura que el Parlamento no realiza en la actualidad "grandes despilfarros", por lo que "la posibilidad de ahorro en gasto corriente y de representación es pequeña".
Para lograr un ahorro que "nos situé a un nivel más razonable en comparación con los demás parlamentos", añade, sería necesario a su juicio disminuir el gasto de personal parlamentario, el de la plantilla y la asignación a los grupos.
Este organismo propone una reducción del número de parlamentarios, pero no quiere ligarlo al presupuesto: "Dicha disminución debería decidirse en función del trabajo que debe hacer el Parlamento y el número de personas que es necesario para realizarlo correctamente, aunque es obvio que su reducción sería una clara medida de ajuste presupuestario".
En el estudio se indica que no es sencillo estimar la dedicación de trabajo de cada parlamentario, pero "sí pueden realizarse análisis que aportan una visión general sobre su empleo del tiempo".
Así, se apunta que, analizando el número de reuniones y visitas de enero a julio de 2012, se comprueba que el 24% de los parlamentarios se ha reunido en comisión entre 100 y 120 veces, mientras que un 40% lo ha hecho sólo entre 55 y 80 veces.
Por lo tanto, se comprueba que la carga de trabajo presencial es "bastante desigual" y no depende del tipo de dedicación elegida, ya que hay parlamentarios con dietas que están en la parte alta y otros de dedicación exclusiva en la parte baja.
Otra forma de mediar la dedicación de los parlamentarios es analizar la proactividad de los distintos grupos parlamentarios. Entre enero y julio de 2012 el partido más activo ha sido Nafarroa Bai, pero, si se tiene en cuenta el número de representantes, los más activos son los miembros de Izquierda-Ezkerra.
Para ello, considera la institución, sería necesario que la retribución de los parlamentarios "estuviera alineada con el mercado", de forma que accedieran a la Cámara "las personas más idóneas para el puesto, con independencia de su capacidad económica".
En ese sentido, subraya que, atendiendo al número de representantes por cada 100.000 habitantes habitual en Europa, en Navarra debería haber 28 parlamentarios, aunque la mayoría de los legislativos del mismo tamaño se mueve entre 30 y 36 parlamentarios.