La semana pasada comparecía en el Parlamento de Navarra el presidente del Consejo Escolar de Navarra para presentar el Informe del Sistema Educativo no universitario en Navarra 2016-2017. En su intervención, Aitor Etxarte alertaba del elevado fracaso escolar en la ESO y reclamaba políticas públicas para corregir esta situación.
Los datos publicados el jueves pasado por el Ministerio de Educación sobre el abandono escolar temprano en 2017 vienen a corroborar la idea del presidente del Consejo Escolar de Navarra. En nuestra región el abandono escolar aumentó en el año 2016 respecto al año anterior, y aunque en 2017 éste ha descendido, no se han logrado todavía los niveles de 2015. Por contra, la tendencia de la media nacional, superior a la navarra, lleva años a la baja.
La comparación de los datos de 2015 con los de 2017 por CCAA muestra cómo solo dos regiones han aumentado su tasa de abandono escolar temprano entre esas fechas: Castilla-La Mancha (+1,3) y Navarra (+0,5). El resto la ha reducido, y la media nacional es de -1,72.
Así las cosas, Navarra es la tercera CCAA con menor tasa de abandono escolar temprano, con un 11,3%, lejos aún de Cantabria (8,9%) y País Vasco (7%). Ambas regiones consiguieron, de 2015 a 2017, reducir aún más su tasa. Es decir, que siempre existe margen de mejora, aunque se esté bien posicionado en el ranking.
Vistos estos datos, solo esperamos que el Departamento de Educación se los tome en serio e implante medidas encaminadas a reducir el fracaso escolar. ¿Existen motivos de preocupación en Navarra a este respecto? Juzguen ustedes mismos.
