Miércoles 22 de noviembre de 2006, 19 hs, sede de la Confederación de Empresarios de Navarra
Inocencio Arias, Cónsul General de España en Los Ángeles

Inocencio Arias, diplomático español, advirtió del peligro de que las armas nucleares desarrolladas por Corea del Norte e Irán puedan caer en manos de terroristas. El Cónsul General abogó por la diplomacia, aunque reconoció que hasta el momento no ha dado los resultados esperados, y culpó a los países miembros de la ONU y no a su Secretario General por no coordinarse en ciertas actuaciones.

La conferencia, organizada por Institución Futuro y celebrada el 22 de noviembre en la sede de la Confederación de Empresarios de Navarra, analizó el funcionamiento de las Naciones Unidas. Además, examinó el peligro que supone que Corea del Norte e Irán estén desarrollando armas nucleares. Inocencio Arias afirmó que “la situación resulta cada vez más peligrosa porque aumenta el número de actores con armas nucleares”, y añadió que “más grave aún es que un grupo terrorista pueda tener acceso a esas armas, bien porque las roba o bien porque se la compra a algún estado canalla”. El Cónsul General calificó a Corea del Norte de régimen no democrático, militarista y despótico que puede querer la bomba como elemento disuasorio contra otros países, como baza negociadora o como objeto de venta. Destacó que la comunidad internacional está dividida al respecto, puesto que algunos países confían en las negociaciones diplomáticas y otros creen en la acción violenta. El diplomático subrayó de Irán que la población apoya que su gobierno esté desarrollando la bomba nuclear. Sobre una posible intervención de las Naciones Unidas en este país, recalcó que presenta muchas dificultades “porque los servicios de inteligencia occidentales no tienen claro dónde están desarrollando las armas”. Además, señaló las claras repercusiones que una intervención tendría en el precio del petróleo, que subiría de precio. El ponente se mostró partidario de la negociación: “la opción diplomática parece inevitable, aunque hasta ahora ha producido muy pocos resultados”. Arias tuvo ocasión de alabar al Presidente de Estados Unidos: “Bush está totalmente demonizado en Europa, es la fuente de todo mal pero, siendo menos internacionalista que Clinton, ha hecho cosas que éste no se atrevió a hacer”. Entre sus méritos, el Cónsul General destacó el aumento de comercio entre EE.UU. y Cuba, la posición de Bush frente a la inmigración y su apoyo a la lucha contra el sida. Arias indicó que cuando en 1945 los vencedores de la Segunda Guerra Mundial, Gran Bretaña, Unión Soviética y Estados Unidos, fundaron la ONU, “se hicieron un traje a medida, en el sentido de que tienen un poder mucho mayor que el resto de países, un poder omnímodo”. En este contexto, habló de lo poco democrático de la institución porque, aunque en la Asamblea General todos los países están representados por igual, “lo que se aprueba allí no es obligatorio jurídicamente”. Los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, el órgano decisorio, son precisamente los fundadores, además de China y Francia, lo que les otorga el derecho a veto. Problemas El ponente desgranó varios de los problemas que afectan al organismo internacional. El principal, según él, es su presupuesto, que calificó de “muy reducido”. Durante siete años, de 1997 a 2003, la ONU tuvo un crecimiento de presupuesto cero porque Estados Unidos se negó a pagar parte de su contribución. Sin embargo, cuando Bush llegó al poder, EE.UU. volvió a pagar. Aun y todo, “la actitud de desapego de USA hacia la ONU es obvia. En la clase dirigente las Naciones Unidas tienen una imagen mediocre”. La escasez de presupuesto es la razón por la que, según el Cónsul General, varias misiones de las Naciones Unidas han fracasado. Otro problema analizado por Arias fue el de la intervención de la ONU en conflictos humanitarios: “en muchas ocasiones la comunidad internacional no interviene basándose en el hecho de que la soberanía interna es sagrada. Existen reticencias de muchos estados que piensan que las intervenciones son el pretexto para que los grandes se inmiscuyan en los asuntos de los países pequeños”. Sobre la figura del Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan, el diplomático recalcó que no se le puede achacar en exclusiva la mala gestión de la ONU, puesto que su cargo depende totalmente de los gobiernos integrantes de la organización. De ahí que el fracaso de las Naciones unidas es imputable a ellos y no a Kofi Annan: “él es el más alto funcionario de las Naciones Unidas, pero nada más, no tiene poder”. El ponente valoró la salida de las tropas militares españolas de Irak. Defendió la decisión tomada por el gobierno socialista en cuanto que estaba cumpliendo con una promesa electoral y la calificó de “gesto político”. Sin embargo, desmintió que la presencia de las tropas españolas fuera ilegal: “la Resolución 1.511 de la ONU, aprobada meses antes de la intervención, amparaba la presencia de tropas extranjeras en Irak, yo mismo estuve presente en esa votación”. Sobre el ponente: Inocencio Arias, diplomático con una larga carrera, desempeña en la actualidad el puesto de Cónsul General de España en Los Ángeles. Con anterioridad fue Embajador ante las Naciones Unidas, Secretario de Estado de Cooperación Internacional, Director de la Oficina de Información Diplomática y Director General del Real Madrid, entre otros cometidos diplomáticos y profesionales. Es autor de varios libros sobre relaciones internacionales, entre los que destaca “Confesiones de un diplomático: del 11-S al 11-M”.

Institución Futuro
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