La semana pasada se publicaba la Encuesta de Población Activa (EPA) del 2º trimestre de 2017 que recoge, entre otras cosas, las cifras de abandono escolar temprano en España. Los datos a nivel nacional son positivos: el abandono escolar desciende al 18,2%, la cifra más baja de la historia.
A nivel regional, Baleares y Murcia siguen siendo las regiones españolas con mayor abandono escolar, con cifras superiores al 25%. En el otro extremo se encuentran País Vasco y Cantabria, con cifras del 7,4% y 8,9% respectivamente.
Navarra sigue siendo, un trimestre más, una CCAA castigada a este respecto. Si comparamos los datos del segundo trimestre de 2017 con los del segundo trimestre de 2016 comprobamos cómo la tasa de abandono escolar ha aumentado en la Comunidad Foral del 10,7% al 13,7%.
Más grave resulta, además, que Navarra sea -comparando una vez más el segundo trimestre de 2017 con el segundo trimestre de 2016- la región en la que más ha aumentado el abandono educativo temprano (3 puntos porcentuales), seguida por Castilla-La Mancha, con un aumento de 1,3 puntos. En el resto de CCAA la tasa de abandono escolar ha descendido, tal y como puede comprobarse en el siguiente gráfico.
La evolución histórica muestra cómo la tendencia de España a partir de 2008 ha sido la de reducción paulatina de su abandono escolar. Todo lo contrario que en Navarra, donde desde 2015, fecha en la que se alcanzó el mínimo de 10,8% de abandono educativo temprano, éste ha ido en aumento -con un pico máximo del 14,3% en el primer trimestre de 2017- hasta alcanzar el 13,7% actual.
Este hecho se traduce en que en 2015 Navarra era la 3ª CCAA con menor tasa de abandono escolar, mientras que en el segundo trimestre de 2017 se encuentra en el 5º puesto.
